
Se dice que la contaminación que puede haber dentro de un hogar puede ser varias veces superior a la que hay en una calle muy contaminada. Así que aunque pensemos que nuestro hogar es un lugar tranquilo y seguro, lo cierto es que puede esconder una gran variedad de sustancias invisibles que pueden estar deteriorando nuestra salud.
POLVO DOMÉSTICO
Es especialmente preocupante las sustancias que se encuentran en el polvo doméstico, ya que de acuerdo con algunas investigaciones, llega a albergar unas 45 sustancias tóxicas que se han relacionado con un mayor riesgo de cáncer y problemas de fertilidad. Entre la sustancia encontradas en el polvo doméstico se hallaron retardantes de llama (que se encuentran con frecuencia en los muebles, productos para bebés y alfombras), así como fenoles, ftalatos y fragancias sintéticas presentes en productos de limpieza del hogar, champús, cremas, entre otros.
Esta exposición es aún más grave cuando estrenamos o renovamos nuestra vivienda. Si tenemos en cuenta que en el mundo occidental pasamos más de un 90% de nuestro tiempo dentro de espacios cerrados y de este, un 50% en nuestros hogares, el nivel de exposición es algo preocupante. Y es que son muchos los productos que entran en nuestros hogares y que pueden formar un cóctel químico muy complejo. Estas sustancias son liberadas por los propios materiales de construcción o decoración, pero además provienen de productos de limpieza, productos de higiene personal, cosméticos, la ropa, los muebles, pinturas, electrodomésticos, plásticos, antipolillas, juguetes, etc…
EFECTO CÓCTEL
Las exposiciones químicas en el hogar no están apenas estudiadas y muchos menos reguladas o controladas. Solo una pequeña parte ha sido estudiada debidamente y la mayoría de estudios se han hecho en entornos laborales, y no en las condiciones particulares que se dan en una casa. Tampoco se han hecho suficientes estudios de los efectos que pueden tener estos contaminantes a bajas concentraciones y a largo plazo, en especial en momentos vulnerables de la vida como la enfermedad, la niñez, el embarazo o la vejez. Desconocemos aún más el efecto de la mezcla de la multitud de contaminantes y de los nuevos productos que se forman como resultado de las interacciones químicas que se dan entre ellos.
DISRUPTORES ENDOCRINOS
Los xenoestrógenos o disruptores endocrinos son químicos artificiales similares a los estrógenos que interactúan con el sistema hormonal humano y animal. Se encuentran normalmente en alimentos, medicinas, cosméticos, plásticos, revestimiento de latas, herbicidas, píldoras anticonceptivas, protectores solares y muchos otros productos de uso diario. Cuando se acumulan en el organismo pueden causar serios problemas, estimulando la funcionalidad de sistema reproductivo de la mujer. Estas sustancias son además responsables de causar un exceso de estrógenos, que provoca un desequilibrio hormonal que está detrás de muchos de los problemas más comunes de salud de la mujer actual (síntomas de menopausia, síndrome premenstrual, aumento de peso, dolor menstrual, endometriosis, miomas, etc.), siendo las mujeres mayores de 35 años las más vulnerables.
CÓMO ELABORAR UN LIMPIADOR MULTIUSOS CASERO
Mezclar agua caliente en una botella de spray manual u otro recipiente, con una cucharita de jabón de platos líquido ecológico, un poco de vinagre blanco y unas pocas gotas de tu aceite esencial preferido (lavanda, romero y pino pueden ser buenas alternativas). Lo puedes utilizar sobre cualquier superficie.